El ex líder de Viejas Locas fue hospitalizado por un pico de diabetes. "Hace rato que viene mal, no le daban pelota", aseguró su madre. Enterate de todos los detalles.
Cristian "Pity" Álvarez, detenido desde 2018 por el homicidio de Cristian Díaz en el barrio porteño de Villa Lugano, fue internado en el Hospital Eurkenian de Ezeiza por un pico de diabetes, según informaron fuentes del Servicio Penitenciario Federal (SPF).
Al principio, el ex líder de Viejas Locas había sido internado en el hospital del complejo penitenciario tras una descompensación, hasta que el lunes, después de las 21 horas, fue trasladado al sanatorio donde continúa en observación.
En una entrevista con Télam, la madre del músico, Cristina Congiú, denunció que el estado de salud de su hijo "hace rato que viene mal" y que "no le daban pelota". "La diabetes es reciente provocada por la desidia y por la mala atención por parte del Estado, sobre todo en ese penal", aseguró.
Desde hace dos años, el Pity está alojado en el sector del Programa Interministerial de Salud Mental Argentino (Prisma) del hospital del penal de Ezeiza, donde se le realiza un tratamiento por su adicción a las drogas.
En una entrevista con Télam, la madre del músico, Cristina Congiú, denunció que el estado de salud de su hijo "hace rato que viene mal" y que "no le daban pelota". "La diabetes es reciente provocada por la desidia y por la mala atención por parte del Estado, sobre todo en ese penal", aseguró.
Desde hace dos años, el Pity está alojado en el sector del Programa Interministerial de Salud Mental Argentino (Prisma) del hospital del penal de Ezeiza, donde se le realiza un tratamiento por su adicción a las drogas.
Meses atrás, Congiú había contado que no veía a su hijo desde el 17 de marzo, cuando se dictó el aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia del coronavirus, y que desde ese día se comunica diariamente por teléfono y una vez por semana le lleva al penal cosas que él le pide.
"Él está más o menos, sabiendo algunas cosas e ignorando otras del afuera. Una de sus angustias es el encierro y no ver a nadie", expresó acerca del estado de ánimo de Álvarez, quien se encuentra a la espera de ir a juicio oral por un "homicidio agravado por el uso de arma de fuego", delito que contempla una pena de 10 a 25 años de cárcel.